LOS SANTOS HABLAN

“Quien medite de corazón cada uno de estos Mensajes, obtendrá Gracias especiales para su vida espiritual. Si es pecador, se convertirá; si es imperfecto, se volverá perfecto; si es santo se hará más santo; si es tentado triunfará; si sufre, podrá encontrar en estas meditaciones, la fuerza, la medicina, el consuelo; y si su alma es débil y pobre, hallará un alimento espiritual y un espejo en el que mirándose continuamente, se embellecerá y se hará semejante a Jesús, nuestro modelo. AMEN, AMEN, AMEN.

miércoles, 10 de mayo de 2017

Enseñanza Núm. 24 “Cómo vencer al mal”.

Evangelización para los Últimos Tiempos
Enseñanza Núm. 24



Enseñanza Núm. 24  “Cómo vencer al mal”.
6 de Noviembre del 2016

No te dejes vencer por el mal, más bien derrota al mal con el bien. (Romanos 12,21)

(Aborrecer el mal es temer a Yahvé.) Aborrezco el orgullo y la arrogancia, los caminos que conducen al mal y a la hipocresía. (Proverbios 8,13)

Hermanos, les ruego que tengan cuidado con esa gente que va provocando divisiones y dificultades, saliéndose de la doctrina que han aprendido. Aléjense de ellos. (Romanos 16,17)

Enójense, pero sin pecar; que el enojo no les dure hasta la puesta del sol, pues de otra manera se daría lugar al demonio. (Efesios 4,26-27)

Cuiden que nadie devuelva a otro mal por mal, sino constantemente procuren el bien entre ustedes y con los demás. Eviten toda clase de mal, dondequiera lo encuentren. (1ª Tesalonicenses 5,15 y 22)

No te creas el más sabio: ten el temor de Yahvé y mantente alejado del mal. Eso será un remedio para tu cuerpo, y refrescará tus huesos. (Proverbios 3, 7-8)

Amados del Señor, odien el mal, pues él cuida las almas de sus fieles y los libra de manos de malvados. (Salmo 97,10)

¡Lávense, purifíquense! no me hagan el testigo de sus malas acciones, (Isaías 1,16)

Lleven con ustedes todas las armas de Dios para que puedan resistir las maniobras del diablo. (Efesios 6,11)


Enseñanza Núm. 23 “La Humildad”.

Evangelización para los Últimos Tiempos
Enseñanza Núm. 23 "La Humildad"



Enseñanza Núm. 23 “La Humildad”.
15 de Octubre del 2016

Sean humildes y amables, sean comprensivos y sopórtense unos a otros con amor. (Efesios 4,2)

Humíllense, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que, llegado el momento, él los levante. (1ª Pedro 5,6)

No hagan nada por rivalidad o vanagloria. Que cada uno tenga la humildad de creer que los otros son mejores que él mismo. (Filipenses 2,3)

Hoy la arrogancia, mañana la vergüenza: la sabiduría vive con los modestos. (Proverbios 11,2)

Vivan en armonía unos con otros. No busquen grandezas y vayan a lo humilde; no se tengan por sabios. (Romanos 12,16)

Humíllense ante el Señor y él los ensalzará. (Santiago 4,10)

Pónganse, pues, el vestido que conviene a los elegidos de Dios, sus santos muy queridos: la compasión tierna, la bondad, la humildad, la mansedumbre, la paciencia. (Colosenses 3,12)

Y mi pueblo, sobre el cual es invocado mi Nombre, se humilla, rezando y buscando mi rostro, y se vuelven de sus malos caminos, yo entonces los oiré desde los cielos, perdonaré su pecado y sanaré su tierra. (2ª Crónicas 7,14)

Finalmente, tengan todos un mismo sentir, compartan las preocupaciones de los demás con amor fraterno, sean compasivos y humildes. (1ª Pedro 3,8)

Busquen a Yahvé todos ustedes, los humildes del país, que cumplen sus mandatos, practiquen la justicia y sean humildes y así, tal vez, encontrarán refugio el día del furor de Yahvé. (Sofonías)


Enseñanza Núm. 22 “La Esperanza”.

Evangelización para los Últimos Tiempos
Enseñanza Núm. 22


Enseñanza Núm. 22 “La Esperanza”.
24 de Septiembre del 2016

Mis adversarios me insultan y se me quiebran los huesos al oír que a cada rato me dicen: «¿Dónde quedó tu Dios?» (Salmo 42,11)

Y ¿quién podrá hacerles daño si se esfuerzan en hacer el bien? Felices ustedes si incluso tienen que sufrir por haber actuado bien. No teman lo que ellos temen ni se asusten, sino bendigan en sus corazones al Señor, a Cristo; estén siempre dispuestos para dar una respuesta a quien les pida cuenta de su esperanza, pero háganlo con sencillez y deferencia, sabiendo que tienen la conciencia limpia. De este modo, si alguien los acusa, la vergüenza será para aquellos que calumnian la vida recta de los cristianos. (1ª Pedro 3,13-16)

¡Yahvé, tu Dios, está en medio de ti el héroe que te salva! El saltará de gozo al verte a ti y te renovará su amor. Por ti danzará y lanzará gritos de alegría como lo haces tú en el día de la Fiesta.» (Sofonías 3,17)

Te preserva el Señor de todo mal, él guarda tu alma. Él te guarda al salir y al regresar, ahora y para siempre. (Salmo 121,7-8)

Sigamos profesando nuestra esperanza sin que nada nos pueda conmover, ya que es digno de confianza aquel que se comprometió. (Hebreos 10,23)

Amen al Señor todos sus fieles, pues él guarda a los que le son leales, pero les devolverá el doble a los soberbios. (Salmo 31,24)

Recuerden la Escritura: Ni ojo vio, ni oído oyó, ni por mente humana han pasado las cosas que Dios ha preparado para los que lo aman. (1ª Corintios 2,9)

Cada uno podrá permanecer sentado bajo su parrón o su higuera sin que nadie lo moleste; pues así lo dice el Señor. (Miqueas 4,4)

Incluso no nos acobardamos en las tribulaciones, sabiendo que la prueba ejercita la paciencia, que la paciencia nos hace madurar y que la madurez aviva la esperanza, la cual no quedará frustrada, pues ya se nos ha dado el Espíritu Santo, y por él el amor de Dios se va derramando en nuestros corazones. (Romanos 5,3-5)

Amados, a pesar de que ya somos hijos de Dios, no se ha manifestado todavía lo que seremos; pero sabemos que cuando él aparezca en su gloria, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal como es. (1 Juan 3,2)

Por lo tanto, hermanos, esfuércense por confirmar el llamado de Dios que los ha elegido. Si obran así, no decaerán, y se les facilitará generosamente la entrada al reino eterno de nuestro Señor y Salvador, Cristo Jesús. (2ª Pedro 1,10-11)


Enseñanza Núm. 21 “La Paz”.

Evangelización para los Últimos Tiempos
Enseñanza Núm. 21



Enseñanza Núm. 21 “La Paz”.
17 de Septiembre del 2016

Felices los que trabajan por la paz, porque serán reconocidos como hijos de Dios. (Mateo 5,9)

Tú la guardas en paz porque confía en ti. (Isaías 26,3)

Les he hablado de estas cosas para que tengan paz en mí. Ustedes encontrarán la persecución en el mundo. Pero, ánimo, yo he vencido al mundo.» (Juan 16,33)

Aléjese del mal y haga el bien, busque la paz y corra tras ella. (1ª Pedro 3,11)  
Pero nadie ha sido capaz de dominar la lengua. Es un azote que no se puede detener, un derrame de veneno mortal. (Santiago 3,8)

Así la paz de Cristo reinará en sus corazones, pues para esto fueron llamados y reunidos. Finalmente, sean agradecidos. (Colosenses 3,15)

Mantengan entre ustedes lazos de paz y permanezcan unidos en el mismo espíritu. (Efesios 4,3)

Ninguna corrección nos alegra en el momento, más bien duele; pero con el tiempo, si nos dejamos instruir, traerá frutos de paz y de santidad. Procuren estar en paz con todos y progresen en la santidad, pues sin ella nadie verá al Señor. (Hebreos 12,11 y 14) 

Les dejo la paz, les doy mi paz. La paz que yo les doy no es como la que da el mundo. Que no haya en ustedes angustia ni miedo. (Juan 14,27)


“¡Yahvé te bendiga y te guarde! ¡Yahvé haga resplandecer su rostro sobre ti y te mire con buenos ojos! ¡Yahvé vuelva hacia ti su rostro y te dé la paz!” (Números 6,24-26)  


Enseñanza Núm. 20 “La Protección de Dios”.

Evangelización para los Últimos Tiempos
Enseñanza Núm. 20

Enseñanza Núm. 20 “La Protección de Dios”.
10 de Septiembre del 2016

El pacto que contraigo con ustedes es que, en adelante, ningún ser viviente morirá por las aguas de un diluvio, ni habrá nunca más diluvio que destruya la tierra.» (Génesis 9,11)

Contigo acometo las huestes, con mi Dios escalo la muralla. (Salmo 18,30)

¿Qué más podemos decir? Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros? (Romanos 8,31)

Las palabras de Dios pasan cualquier prueba, son un escudo para los que confían en él. (Proverbios 30,5)

Yahvé es bueno; para los que en él confían, es un refugio en el día de la angustia. Conoce a los que en él confían, y los salva de las aguas embravecidas. (Nahúm 1,7)

El malo morirá por su maldad y los que odian al justo, lo tendrán que pagar. (Salmo 34,22)

Ningún arma que hayan forjado contra ti resultará, y harás callar a cualquiera que te acuse. Este es el premio para los servidores de Yahvé y la victoria que les garantizo, dice Yahvé. (Isaías 54,17)

El Señor es fiel: a ustedes los fortalecerá y preservará del Maligno. (2ª Tesalonicenses 3,3)

Él es mi roca, en él me refugio. Es mi escudo, mi salvación, mi ciudadela y mi refugio: mi salvador me salva de la violencia. Invoco a Yahvé que es digno de confianza y me veo libre de mis enemigos. (2a Samuel 22,3-4)

No corran tras el dinero, sino más bien confórmense con lo que tienen, pues Dios ha dicho: Nunca te dejaré ni te abandonaré. (1ª Juan 5,18)

¡Yahvé, mi fortaleza!, a él le cantaré, él fue mi salvación, él es mi Dios y lo alabaré, el Dios de mi padre, lo ensalzaré. (Éxodo 15,2)  

Dile al Señor: «Mi amparo, mi refugio, mi Dios, en quien yo pongo mi confianza». Él te librará del lazo del cazador y del azote de la desgracia; te cubrirá con sus plumas y hallarás bajo sus alas un refugio. No temerás los miedos de la noche ni la flecha disparada de día, ni la peste que avanza en las tinieblas, ni la plaga que azota a pleno sol. (Salmo 91, 2-6)
No te pido que los saques del mundo, sino que los defiendas del Maligno. (Juan 17,15)

Yo estoy contigo; te protegeré a dondequiera que vayas y te haré volver a esta tierra, pues no te abandonaré hasta que no haya cumplido todo lo que te he dicho.» (Génesis 28,15)


Enseñanza Núm. 19 LA GRATITUD

Evangelización para los Últimos Tiempos
Enseñanza Núm. 19

Enseñanza Núm. 19 LA GRATITUD
3 de Septiembre del 2016       

Porque todo lo que Dios ha creado es bueno y no hay por qué rechazar un alimento que se toma dando gracias a Dios; es santificado por la palabra de Dios y la oración. (1 Timoteo 4:4-5)

Gritos de gozo y de alegría, canción del novio y de la novia, voz de los que traigan sacrificios de alabanza a la Casa de Yahvé. Y dirán éstos: «Alaben a Yahvé porque es bueno, porque es eterno su amor.» Pues haré volver a los que fueron desterrados, y estarán como antes. (Jeremías 33,11)

En resumen: por mi conciencia me someto a la Ley de Dios, mientras que por la carne sirvo a la ley del pecado. (Romanos 7,25)  
Dios es el Refugio del oprimido. (Salmo 9,1)

El Señor es mi fuerza y mi escudo, mi corazón confiaba en él, y me socorrió; por eso mi corazón se alegra y le canto agradecido. (Salmo 28,7)

Y nosotros, tu pueblo, el rebaño de tu redil, te daremos gracias para siempre; de edad en edad diremos tu alabanza. (Salmo 79,13)

¡Aleluya! Den gracias al Señor porque él es bueno, porque su amor perdura para siempre. (Salmo 106,1)  

Alaben al Señor porque es bueno. Porque es eterna su misericordia. (1ª Crónicas 16,34)

Den gracias a Dios Padre en nombre de Cristo Jesús, nuestro Señor, siempre y por todas las cosas. (Efesios 5,20)

Y den gracias a Dios en toda ocasión; ésta es, por voluntad de Dios, su vocación de cristianos. (1ª Tesalonicenses 5,18)

Debemos dar gracias a Dios en todo tiempo por ustedes, hermanos. Es justo hacerlo, ya que siguen progresando en la fe y crece el amor de cada uno a los hermanos. (2ª Tesalonicenses 1,3)

Sean constantes en la oración, quédense velando para dar gracias. (Colosenses 4,2)

Así la paz de Cristo reinará en sus corazones, pues para esto fueron llamados y reunidos. Finalmente, sean agradecidos. Que la palabra de Cristo habite y se sienta a gusto en ustedes. Tengan sabiduría para que puedan enseñar y aconsejar unos a otros; canten a Dios de todo corazón y con gratitud salmos, himnos y alabanzas espontáneas. Y todo lo que puedan decir o hacer, háganlo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él. (Colosenses 3,15-17)