LOS SANTOS HABLAN

“Quien medite de corazón cada uno de estos Mensajes, obtendrá Gracias especiales para su vida espiritual. Si es pecador, se convertirá; si es imperfecto, se volverá perfecto; si es santo se hará más santo; si es tentado triunfará; si sufre, podrá encontrar en estas meditaciones, la fuerza, la medicina, el consuelo; y si su alma es débil y pobre, hallará un alimento espiritual y un espejo en el que mirándose continuamente, se embellecerá y se hará semejante a Jesús, nuestro modelo. AMEN, AMEN, AMEN.

martes, 18 de octubre de 2016

Enseñanza Núm. 17 EL CORAZÓN y Mensaje de la Virgen del Apocalipsis.

Evangelización para los Últimos Tiempos
Enseñanza Núm. 17

Enseñanza Núm. 17
Tema: EL CORAZÓN.


Abre tus oídos, escucha mis palabras, pon atención a mis enseñanzas. Te gustará conservarlas en tu memoria y tenerlas listas en tus labios cada vez que tú quieras. (Proverbios 22:17-18) 

¿Queremos provocar acaso los celos del Señor? ¿Seremos acaso más fuertes que él? Todo está permitido, pero no todo me conviene. Todo está permitido, pero no todo me hace bien. (1 Corintios 10:22-23) 

No hay árbol bueno que dé frutos malos, ni tampoco árbol malo que dé frutos buenos. Cada árbol se conoce por sus frutos. No se recogen higos de los espinos ni se sacan uvas de las zarzas. Así, el hombre bueno saca cosas buenas del tesoro que tiene en su corazón, mientras que el malo, de su fondo malo saca cosas malas. La boca habla de lo que está lleno el corazón. (Lucas 6:43-45) 

Pero Yavé dijo a Samuel: «No mires su apariencia ni su gran estatura, porque lo he descartado. Pues la mirada de Dios no es la del hombre; el hombre mira las apariencias, pero Yavé mira el corazón. (1 Samuel 16:7)

El mismo Dios que dijo: Brille la luz en medio de las tinieblas, es el que se hizo luz en nuestros corazones, para que se irradie la gloria de Dios tal como brilla en el rostro de Cristo. (2 Corintios 4:6)

El hombre de corazón sabio acepta los consejos, mientras que el pretencioso corre a su perdición. (Proverbios 10:8)

Cuando me invoquen y vengan a suplicarme, yo los escucharé; y cuando me busquen me encontrarán, siempre que me imploren con todo su corazón. (Jeremías 29:12-13)

No se preocupen tanto por lucir peinados rebuscados, collares de oro y vestidos lujosos, todas cosas exteriores, sino que más bien irradie de lo íntimo del corazón la belleza que no se pierde, es decir, un espíritu suave y tranquilo. Eso sí que es muy precioso ante Dios. (1 Pedro 3:3-4) 

Las caras no se parecen y mucho menos los corazones. (Proverbios 27:19)

Cada uno dé según lo que decidió personalmente, y no de mala gana o a la fuerza, pues Dios ama al que da con corazón alegre. (2 Corintios 9:7)

Crea en mí, oh Dios, un corazón puro, renueva en mi interior un firme espíritu. (Salmo 51:12)

¡Con todo mi corazón te he buscado, no me desvíes de tus mandamientos! En mi corazón escondí tu palabra para no pecar contra ti. (Salmo 119:10-11)

Les encargo solamente que recuerden y practiquen el mandamiento de la Ley que les entregó Moisés y que es amar a Yavé, nuestro Dios, siguiendo sus caminos y observando Sus Mandamientos. Permanezcan fieles, sirviéndolo con todo el corazón y con toda el alma. (Josué 22:5) 

Mensaje de la Virgen del Apocalipsis al término de la velada, dado al Cenáculo de Oración de los Apóstoles de los Últimos Tiempos, entre el 20 y 21 -Media noche- de Agosto del 2016.

Hijos Míos:
Esta noche nuevamente nos reunimos en el Huerto de los Olivos en compañía de Mi Hijo Jesús para hacer oración junto con ÉL.

Mis pequeños, en esta velada queremos hablarles sobre el corazón de los hombres: nada revela más de los corazones que las palabras que nacen y salen de él mismo. Por eso es muy necesario que aprendan y guarden en el interior de sus corazones la Palabra del Padre Eterno, revelada y escrita en la Santa Biblia, para que de esta manera todos ustedes puedan usarla cuando se enfrenten a pruebas y tentaciones, animarse, fortalecerse y vencer al mal. Los versículos que les damos esta noche son muy claros y precisos para hablar sobre el corazón de los hombres, lugar donde se puede guardar el tesoro más valioso que es Dios mismo...


Hagan de su corazón un verdadero templo de LA SANTÍSIMA TRINIDAD, guardando la palabra de Dios y sus enseñanzas, para que vivan y den testimonio de los que dice el Señor: “el hombre bueno saca cosas buenas del tesoro que tiene en su corazón, mientras que el malo, de su fondo malo saca cosas malas. La boca habla de lo que está lleno el corazón.” Así pues, pídanos que su corazón esté siempre lleno de cosas buenas, para que las reflejen a sus semejantes y den testimonio de la infinita bondad del Padre Eterno, de la misericordia de Jesucristo, de la sabiduría del Espíritu Santo y de Mi amor de Madre.

Los bendigo y protejo a todos.
AMÉN, AMÉN, AMÉN.

Mensaje Certificado por el M.I.D.P. Núm. E/20/08/16-C.O.